El ex líder de la Generalitat y el eurodiputado de Junts, Carles Puigdemont, ha enviado una carta a todos los parlamentarios europeos en la que relaciona su acusación de terrorismo con una declaración realizada por José María Aznar, expresidente del Gobierno (PP), en relación a la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno por parte del PSOE. Según Puigdemont, la decisión del juez Manuel García Castellón de investigarlo por terrorismo en el caso ‘Tsunami Democràtic’ no fue una coincidencia, sino que ocurrió después de las palabras de Aznar.
En el comunicado, Puigdemont asegura que las declaraciones de Aznar recibieron apoyo de García Castellón, la prensa conservadora y representantes empresariales y de la Iglesia. Además, destaca que no es una casualidad que García Castellón anunciara la investigación por terrorismo el mismo día en que el PSOE y Junts tenían previsto hacer público su acuerdo, y añade que el caso estuvo paralizado durante seis años.
Además, Puigdemont acusa al juez Joaquín Aguirre, del Juzgado de Instrucción 1 de Barcelona, de reactivar el caso Voloh coincidiendo con el debate sobre la ley de amnistía en el Congreso el pasado 30 de enero. Según Puigdemont, este caso se asemeja a la teoría de la conspiración en torno a los atentados del 11M y busca perjudicar las expectativas electorales del PSOE y beneficiar al PP.
Por otro lado, Puigdemont también critica al Parlamento Europeo, afirmando que se ha convertido en un instrumento para las estrategias del PP, imponiendo sus estándares a la mayoría conservadora de Europa, lo cual considera perjudicial para el futuro de la Unión.
En resumen, Puigdemont sostiene que todos estos acontecimientos podrían haberse evitado si Junts hubiera investido a Feijóo o hubiera impedido que Sánchez se convirtiera en presidente.
